4 cosas que las parejas pueden hacer para arreglar una relación rota
La mayoría de las parejas acuden a profesionales para recibir asesoramiento matrimonial, cuando ya han intentado todo lo que pueden hacer por cuenta propia para tratar de superar las dificultades que están encontrando en su relación. Sin embargo, siempre llega un momento en el que se topan con un muro de dolores y sentimientos acumulados.
Están agotados; sus recursos internos y su energía están en niveles peligrosamente bajos. A menudo, sintiéndose magullados y derrotados, buscan ayuda con una súplica desesperada de dirección y consejo. Sus ojos plantean la pregunta: ¿Deberíamos arreglar nuestra relación y tratar de hacerla mejor, tomarnos un tiempo para pensar las cosas o simplemente rendirnos? La respuesta depende de cada pareja.
¿Es posible arreglar una relación rota?
Algunas parejas pueden reparar lo que está roto en su matrimonio con poderosos hechizos de amor o asistiendo a terapia. El primer factor a considerar es si hay o no esperanza de recuperación.
Las respuestas a estas seis preguntas pueden guiarte a una conclusión sobre si es posible reparar tu relación:
- ¿Ambos quieren lo mismo?
- ¿Queda suficiente energía en la relación para darles el combustible que necesitan para reparar y volver a comprometerse?
- ¿Cómo han resuelto traumas en el pasado o están enterrados en patrones repetitivos que nunca han funcionado?
- ¿Están huyendo antes de dar una oportunidad a la resolución?
- ¿Hay problemas ocultos subyacentes que estén saboteando sus posibilidades de reconectarse?
- ¿Todavía quieren intentarlo?
A veces, uno de los dos tiene el papel de la parte agraviada y el otro se siente arrepentido y humillado. En otras ocasiones, son dos personas que han estado construyendo conflictos en su relación que nunca fueron resueltos y ahora, se han convertido en cánceres emocionales fuera de control. Tienen un estilo de lucha exagerado e impotente y no son capaces de escuchar al otro en el estruendo de su propio dolor. Por el contrario, otras parejas están en una guerra de silencio; el primero en hablar con algún apego para conectarse pierde poder.
Aunque existen muchos tipos de relaciones, para poder superar las traiciones más terribles, las conductas dolorosas más angustiosas o las decepciones más desalentadoras, hay que tener una amplia perspectiva para predecir si pueden o no encontrar el camino de regreso al amor que una vez conocieron. Veamos algunas formas en las que una pareja puede mejorar su relación:
Estar atento a lo que dice su pareja
Cuando uno de los miembros de la pareja está hablando, independientemente de su tono de voz, la otra persona debe mirarlo y escucharlo. Incluso si hay desacuerdo, es evidente que lo que el otro tiene que decir sigue siendo importante.
Las parejas pueden tener un historial de interrupciones, hablar en exceso, desestimar o minimizar, pero deben aprender a detener esos comportamientos y a redirigir su atención a lo que el otro está diciendo.
Mostrar preocupación y compasión entre ambos
Las parejas que han perdido la confianza y el apoyo del otro, ya sea recientemente o durante un largo período de tiempo, aún pueden mostrar preocupación cuando expresan una angustia verdadera. Si no pueden usar palabras o gestos tranquilizadores, especialmente si se les culpa en el momento, muestran consideración por la angustia de su pareja mediante su lenguaje corporal o expresión facial.
Es como si supieran dónde está el punto de ruptura y no quisieran ir allí. La compasión debe gobernar sobre el dominio cuando uno de los miembros de la pareja cae en un hueco emocional.
Recordar los momentos felices
Hay ocasiones en las que parece que la hostilidad se ha apoderado de la relación. Son incapaces de encontrar nada en el otro que valga la pena escuchar. Están interrumpiendo, invalidando y gritándose el uno al otro constantemente.
Luego, aparentemente de la nada, uno de ellos saca a la luz a una experiencia que compartieron en el pasado o algo que está sucediendo entre ellos, y ambos comienzan a reír. La tensión desaparece de inmediato, aunque sea por un momento, y ambos se miran como si en realidad fueran buenos amigos jugando a odiarse. Incluso si la pelea se reanuda, más tarde sabrán que su discusión no era realmente importante y pueden volver a enfocarse en esos pequeños momentos de alegría.
Reducir los conflictos
Cada pareja sabe qué tan lejos puede llegar. Lamentablemente, ese conocimiento subyacente no siempre les impide acercarse demasiado al límite de tolerancia de su pareja, y muchas relaciones terminan debido a ese sacrilegio.
Una luz de esperanza se asoma cuando uno de los dos miembros de la pareja reconoce que está muy cerca de cometer un error y lo evita a toda costa. Ambos deben saber que ciertas palabras o formas de ser pueden lastimar a su pareja de forma irreparable y que se debe establecer un pacto invisible que les impida ir al límite.